LOS SEGUROS DE VIDA

Como a mí, a muchos nos preocupa que si nos ocurre algo, esta circunstancia le pueda provocar a nuestras familias graves problemas económicos, y no sólo me refiero a los gastos de defunción sino también a las deudas que a lo largo de nuestras vidas contraemos, ya sea al comprar una vivienda, un coche, etc., pero además también nos inquieta cómo subsistirán nuestras familias sin nuestra ayuda económica diaria.

Por ello, en esta entrada vamos a adentrarnos un poco más en el mundo de los seguros y más en concreto en los seguros de vida.

¿Qué es un seguro?

El seguro es un contrato en el que intervienen varias personas, el asegurado debe abonar una prima al asegurador con la que este último, al recibirla, se ve obligado a cumplir la prestación convenida si ocurre las circunstancias contratadas, que pueden ser un accidente, invalidez, enfermedad, etc., y según este contrato el asegurador deberá pagar dicha prestación a los beneficiarios del asegurado, qué pueden ser de varias clases como veremos a continuación.

¿Qué es el seguro de vida? 

Como hemos dicho, cuando firmamos el contrato con la aseguradora nos obligamos al pago de unas primas o cantidades en la forma que estipulemos pudiendo ser anual, mensual, trimestral, semestral. Con esta prima que abonamos al asegurador, éste se compromete a abonar a las personas o entidades que hayamos designado como beneficiarios una cantidad de dinero cuando ocurra una de las circunstancias contratadas que hemos comentado en el párrafo anterior.

¿Por qué debemos contratar un seguro de vida? 

A nadie le gusta pensar en la muerte ni en otras cosas tristes, por eso a veces cuando oímos la palabra “seguro de vida”, inmediatamente pensamos en que no lo necesitamos. Pero existen numerosas razones para contratar un seguro de vida:

-          Para reducir el impacto económico sobre las personas que dependen económicamente del asegurado y que se produce cuando ocurre una de las causas que hemos dicho, puesto que las responsabilidades económicas y las necesidades domésticas siguen a pesar de dicha circunstancia.

-          Cuándo existen préstamos como el de una hipoteca, un coche, etc., ya que si no tenemos un seguro que cubra dicho préstamo nuestras familias tendrán que hacer frente a su pago con los problemas económicos que esto conlleva.

-          También existen seguros de vida que cubren las facturas que se tengan durante un tiempo determinado después de la circunstancia prevista en el seguro, así como el pago de los estudios futuros de nuestros hijos.

-          Igualmente podemos contratar seguros para el caso de una invalidez, incapacidad o enfermedad grave, ya que si no podemos continuar con nuestra vida normal, no podemos trabajar o necesitamos una persona que nos cuide, este seguro se nos ayudará a hacer frente a estas circunstancias.

Como podemos ver hay muchas razones, pero la seguridad y tranquilidad, de la familia en general, es lo fundamental para contratar cualquier tipo de seguro. Y esa seguridad y tranquilidad cobran especial relevancia cuando además se trata de un seguro de vida, ya que cualquiera de los siniestros amparados en ese tipo de póliza pueden cambiar demasiado tu propia vida o la de tu familia, por lo que lo mejor es estar lo más seguros posible.

¿Cuál es el seguro de vida que debemos contratar según nuestras circunstancias? 

Como hemos visto en el apartado anterior existen varias razones para contratar un seguro, pues bien, el tipo de seguro correcto para cada persona depende de sus circunstancias, es decir, si estamos solteros o vivimos en pareja,  si tenemos hijos y que edad tienen,  qué cantidad considera adecuada para cubrir la nueva situación de su familia, etc.

Una cosa tenemos que tener clara, tengamos o no alguna de las situaciones anteriores es que  el todos deberíamos tener unos ahorros o un seguro cubra los gastos de decesos, es decir, que cubra todos los gastos del funeral, ya que si no disponemos de uno, ya que deben ser afrontados por nuestras familias y el funeral implica muchos gastos.

En los seguros de vida podemos incluir los gastos funerarios y los de entierro, además podemos revisar cada vez que queramos las condiciones de nuestro seguro adaptándolo a la situación que tengamos en ese momento.

¿Cómo contratamos un seguro de vida?

Se puede realizar el contrato a través de un intermediario o corredor de seguros, con la intervención de una compañía de seguros o una entidad bancaria o utilizando a su empresa o asociaciones.

Pero ojo, los corredores de seguros cobran su nómina según los seguros que logre vender por ello intentarán que compremos la que le otorgue mayor comisión. Aun así no hay que generalizar, ya que existen otros que nos sabrán guiar de forma profesional para que contratemos el seguro que esté más cerca de nuestras necesidades, además respetará nuestras opiniones y no nos presionará a la hora de decidir.

Las entidades bancarias o las compañías de seguro no suelen tener comisiones y además tienen productos que se adaptan a otras circunstancias la cobertura de los préstamos  como la compra de una casa, de un vehículo, etc.

En las empresas, los seguros suelen ser por colectivos lo que implica que sean más económicos.

¿Cuánto cuesta un seguro de vida? 

Depende de las coberturas que contratemos, es difícil concretar un importe ya que depende del capital efectivo, de la indemnización por fallecimiento, los gastos de entierro, etc., por ello, es esencial comparar seguros, ver lo que cubre cada uno y preguntar a familiares o amigos que es lo que tienen contratados ellos.

Como apunte final,  y para que os hagáis una idea yo tengo contratados varios seguros, aquí os voy a poner una descripción de cada uno:

-          Seguro de vida por préstamo personal: este seguro que pago con una prima anual de aproximadamente 30 euros, cubre el préstamo de mi coche si fallezco o quedo invalida, en la cuantía estipulada en el contrato que se va revisando anualmente. Es decir, si ocurriese esta circunstancia el asegurador pagaría al banco con el que tengo el préstamo la cantidad dicha, así mis familiares no tiene que hacerse cargo de dicho préstamo.

-          Seguro de vida por préstamo hipotecario: este seguro del que pago una prima anual aproximada de 300 euros, cubre la mitad de la cantidad del préstamo hipotecario, es decir, el asegurador paga al banco la mitad de la cantidad de la hipoteca, así mi pareja no sé ve en la problemática de hacer frente al préstamo completo, con la tranquilidad que esto conlleva para ambos.

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Como en las anteriores entradas, espero que os haya servido este tema para saber un poquito más sobre cuestiones importantes del día a día.

Gracias a tod@s. Saludos.